El Puente Viejo de Carcassonne, también conocido como el Puente Viejo de Aude, es un puente medieval ubicado en la ciudad fortificada de Carcassonne en el sur de Francia.
El puente fue construido originalmente en el siglo XIII y ha sido reconstruido varias veces a lo largo de su historia.
El Puente Viejo cruza el río Aude y conecta la Cité de Carcassonne con la ciudad moderna.
Es un lugar popular para pasear y disfrutar de vistas panorámicas de la fortaleza y el río. También es un importante punto de acceso para visitar la ciudad fortificada, ya que muchos turistas ingresan por el Puente Viejo.
A lo largo de los siglos, el puente ha sido escenario de varios eventos históricos y ha sido testigo de la evolución de Carcassonne. Hoy en día, es uno de los atractivos turísticos más importantes de la ciudad y una de las principales formas de acceder a la Cité de Carcassonne.